28 Odontopediatría DENTAL TRIBUNE Hispanic & Latin America Fig. 2. Tras terapias de pulpa (52 y 62) y remoción de caries (52, 51, 61 y 62) se procede a la reconstrucción de piezas con coronas tipo Pedo-form para llevar resinas. En la vista 52 Fig.3. Reconstruyendo a mano alzada 51 y 52. Fig. 4. Eliminación de la corona plástica. ción de los dientes anteriores superiores. Los tratamientos restauradores descri- tos en este artículo se aplican después de traumatismos y caries amplias que imposibilitan su reconstrucción de ma- nera habitual, los cuales son de mayor recurrencia en niños. Basándonos en las propiedades de cada material, podemos determinar que las coronas de circonio nos brindan más ventajas que las de resina, ya que pro- porcionan una mejor estética, resisten- cia y durabilidad. La caries dental es una disbiosis (des- equilibrio microbiano) (Simon-Soro)1 y enfermedad multifactorial que afecta las estructuras mineralizadas de los dientes (esmalte y dentina) y el cemento. Es cró- nica y, generalmente, cuando no se trata, progresa hasta la destrucción total de la pieza dentaria. Cuando los niños pier- den precozmente sus dientes primarios, sea por trauma o por caries, necesita- mos rehabilitarlos estética y funcional- mente hasta que ocurra la aparición de los dientes sucesores permanentes1. La forma tradicional de restaurar dien- tes anteriores temporales desde 1950 es la utilización de coronas de acero cro- mo. Aunque este tipo de restauraciones cumplen con los requisitos funcionales, su apariencia estética no es del todo aceptada2. Varias alternativas terapéuticas se han utilizado para restaurar la zona antero- superior de los dientes primarios con la finalidad de dar una apariencia es- tética, y tener una opción diferente a la corona metálica. Una de las primeras propuestas la hace Kopel (1967)3 con las coronas fenestradas (facial cut-out stainless steel crown [SSC]), que consis- tía en una fenestración de la cara ves- tibular de la corona para ser rellenada con resina compuesta. Por otra parte, las coronas de celuloide (strip crown, Pedo-form), introducidas en la década de 1970, contienen fundas de celuloide de resina compuesta para ser adheridas posteriormente al diente preparado. Las coronas prefabricadas con frente esté- tico (resin-veneered SSC), introducidas en la década de 1990, son coronas pre- fabricadas con materiales como resinas compuestas o bien termoplásticas, es- tán adheridas a coronas de acero-cro- mo (NuSmile crowns, Kinder-Crowns, Cheng-Crowns, Dura Crowns, Whiter Biter II). Las coronas metálicas con fren- te estético previamente farbicadas en el consultorio, así como las coronas de Fig. 5. Post operatorio inmediato policarbonato (Artglass), han surgido en su momento como alternativas terapéu- ticas por ser materiales excelentes para el recubrimiento de dientes primarios; sin embargo, algunas han fallado en du- rabilidad, fracturas, pérdida, color, etc., por lo que se continúa en la búsqueda de aquellas que proporcionen el mejor resultado4. Las nuevas coronas hechas de circonio monolítico, introducidas al mercado a finales de la década pasada, ofrecen una alternativa estética adecuada y tienen como principal ventaja el color y la du- rabilidad; empero, los reportes de su uso en dientes primarios se ha limitado so- lamente a casos aislados. Son considera- das como la mejor alternativa estética de todas, aunque tienen sus indicaciones precisas4. Para la elección del material de restau- ración en dentición primaria no solo se deben tomar en cuenta las consideracio- nes técnicas, sino algunos factores como la edad, el riesgo de caries y la coopera- ción del niño5. El objetivo de este artículo es la revisión de las ventajas y desventajas de las co- ronas de resina frente a las coronas de circonio, con el fin de contribuir al co- nocimiento teórico de estas excelentes alternativas clínicas. Caries dental Para Boj y col4 la caries dental en el niño es una enfermedad infecciosa de origen microbiano, localizada en los tejidos duros dentarios, que se inicia con una desmineralización del esmalte por áci- dos orgánicos producidos por bacterias orales específicas que metabolizan a los hidratos de carbono de la dieta5. Por etiología, para Keyes (1960)6 la ca- ries se considera una enfermedad mul- tifactorial, en la que interactúan facto- res dependientes del huésped, la dieta y la placa dental. El autor representa esta multifactoriedad con tres círculos sobrelapados, en los cuales cada círcu- lo representa un factor. Al coincidir los tres en un punto, este punto representa la enfermedad. Los factores o variables son: dieta, huésped, microorganismo. Newbrun (1978)7 agregó un cuarto fac- tor: el tiempo, y denominó al huésped como hospedero y a la dieta como sus- trato. Actualmente, a la placa dental se la denomina biofilm8. Franco9 define la caries como una enfer- medad crónica que envuelve la destruc- ción dentaria, la cual conduce a pérdida