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Dental Tribune Latin American Edition

DENTAL TRIBUNE Hispanic & Latin America Si bien la práctica de la Odontología nos ofrece una serie de satisfacciones, también nos expone a sufrir ciertos contratiempos y al riesgo de contraer algunas enfermedades como el estrés. Aunque esta condición no es exclusiva de nuestra profesión, su etiología indi- ca que que somos candidatos ideales para padecerlo. Concepto y fisiopatología En 1935 Hans Selye definió el Síndro- me General de Adaptación o estrés como “el conjunto de reacciones sis- témicas inespecíficas que se producen en el organismo cuando es sometido de forma prolongada y continua a la acción de un estímulo nocivo de natu- raleza e intensidad variable”. La medi- cina encontró así el diagnóstico a esta enfermedad cuyo cuadro clínico es variable y en el que se pueden alterar las funciones cardíacas, de circulación sanguínea (hipertensión), tiempo de coagulación; se pueden inhibir ciertos aspectos de la reacción inmunológica, se alteran condiciones gástricas in- clusive hasta formarse úlceras pépti- cas, dificultades urinarias, disfunción sexual, tensión muscular, bruxismo, problemas hormonales, trastornos psicológicos como ansiedad e irrita- bilidad, insomnio, entre otros, dentro de un marco de fatiga e incomodidad general. La fisiopatología del estrés presenta tres etapas: la reacción de alarma, el estadío de resistencia y el agotamien- to. La alarma se genera por la acción conjunta de los sistemas simpático y parasimpático. El simpático estimula la producción de adrenalina y simul- táneamente el hipotálamo liberando hormonas por parte de la hipófisis, siendo estas defensas somáticas en la reacción adaptativa ante los factores generadores de tensión o estresantes, los cuales no necesariamente pueden ser negativos; una sorpresa muy agra- dable por ejemplo genera una reac- ción similar. Durante la etapa de resistencia el ser humano al verse obligado a reprimir sus impulsos instintivos de ataque o de fuga ante un factor de estrés, por ejem- plo ante un reclamo indebido de un paciente, las alternativas de golpearlo (ataque) o de abandonar el consultorio (fuga) son contenidas, pero las conse- cuencias químicas internas no pueden ser suprimidas. La acumulación de estas situaciones puede ser asimiladas por el organismo o conducir al estadío de agotamiento, especialmente si el cuerpo no recibe el suficiente descan- so que le permita recuperar su equi- librio. El agotamiento es el estado crónico de estrés que destruye el bienestar físico y emocional con las consecuencias ya señaladas. La respuesta orgánica varía de una persona a otra dependiendo de su carácter, por lo que hay personas más susceptibles que otras. Estrés y odontología La imagen que proyectamos los odon- tólogos a la colectividad de personas amables y tranquilas es precisamente lo que nos permite inspirar confian- za y disminuir la tensión de nuestros pacientes. Esa serenidad la debemos mantener, independientemente de nuestro estado de ánimo, de proble- mas personales y de aquellos suscita- dos por los pacientes o inherentes al caso clínico que estemos tratando. Ese aparente «aplomo» demanda, des- de el punto de vista de la fisiopatología del estrés, una actitud de «resistencia» ante los estímulos que lo provocan, impidiendo las respuestas de ataque o fuga que nos liberarían de las cargas tensionales. Concomitantemente, la mayoría de los odontólogos latinoamericanos trabajamos en consultorios indivi- duales, administrados deficiente- mente. Recibimos a una población empobrecida que busca solución a otros problemas más urgentes que los de su salud bucal. Enfrentamos una competencia profesional no pro- gramada y en ocasiones desleal. Y tenemos que lidiar con un desarrollo científico y tecnológico de la profe- sión impresionantemente rápido que nos obliga a esforzarnos intelectual y económicamente para ofrecer mejo- res opciones de tratamiento a nues- tros pacientes (cada vez más exigen- tes y mejor informados a través del internet) para poder mantenerlos como tales, lo que demanda gran responsabilidad, incremento de ho- ras de estudio y trabajo y, por ende, tensión permanente. El presente artículo se sustenta en la realización de 180 encuestas efectua- das por el autor a odontólogos ecuato- rianos y sus conclusiones más signifi- cativas son las siguientes: 1. Fruto de una actividad profesional atribuible a pacientes molestos y a su deficiente organización administra- tiva, el 82.2% de los encuestados ha sufrido cambios de carácter y el 21% tiene estas alteraciones frecuente- mente, hasta el punto de que el 20% ha pensado en algún momento aban- donar la profesión. Al 73.3% de los colegas encuestados le genera tensión su falta de organización administrativa y sus fallas en el sistema de cobro de honorarios. 2. Todos los encuestados se ha sentidos molestos alguna vez con sus pacientes, especialmente por su incumplimiento de citas y/o sus compromisos econó- micos. 3. El 45.5% reconoce haber sufrido es- trés relacionado directamente con la odontología, superado únicamente por el 48.8% con problemas musculares o esqueléticos a nivel de columna verte- bral, los cuales además de origen pos- tural pueden tener origen tensional. Con estos datos y antecedentes es fá- cil deducir que el estrés es una enfer- medad frecuente en los odontólogos y debe ser estudiada como tal. Nosotros debemos estar preparados para preve- nirla y tratarla con oportunidad y efec- tividad. Factores de estrés en odontología Los factores de estrés puede ser ma- nejados de forma negativa o positiva. Negativa es cuando se cae en la ten- tación de evadir la realidad mediante adicciones y dependencias: tabaco, al- cohol, drogas, etc. Didácticamente los factores de estrés pueden clasificarse en: extremos, ge- nerales e inherentes a la actividad pro- fesional. Factores extremos: divorcio, muerte de un ser querido, dificultades econó- micas serias, accidentes o enferme- dades graves, privación de la libertad, etc. Factores generales: violencia social, contaminación ambiental, insegu- ridad, situación del país, peligros de guerra, tráfico, etc. En términos generales para prevenir el estrés lo ideal es que el odontólogo posea una vida equilibrada donde se encuentre un conjunto armónico de: Trabajo Vida familiar y social Afición Ejercicio físico (deportes) Adicionalmente podría inte- resarse en actividades espe- cíficas antiestrés como ejer- cicios de relajación y medi- tación. Conclusiones y recomendaciones 1. Es imperativo que en las Facultades de Odontología de América Latina se dicten cursos de Ergonomía Profesio- nal y administración del consultorio, economía odontológica (honorarios), enfermedades profesionales, etc., tendientes a solucionar los problemas del odontólogo, lo que redundará di- rectamente en beneficio del gremio y de la población. 2. El estrés como enfermedad gre- mial y profesional debe ser estudiada y prevenida por el odontólogo para evitar que se convierta en un impe- dimento a su desarrollo personal y profesional. 3. ¡El conocimiento de sus objetivos personales y profesionales es la base para que el odontólogo haga de su pro- fesiónunmedioeficazparalograrlafe- licidad! Consultorio26 Estrés en odontología E l objetivo de este artículo es que el odontólogo conozca sus posibles factores de riesgo de estrés y, aunque sea difícil evi- tarlos, ofrecer pautas para minimizar su efecto y colaborar así a una práctica de la profesión menos estresante. Por Byron Benalcázar Larrea* * El Dr. Benal- cázar Larrea, es Doctor en Odontología por la Universi- dad Central del Ecuador con Diplomado y Especialidad en Administración y Marketing por la Universidad Tecnológica Indo- américa. Es Profesor de los Insti- tutos de Postgrado de las Facul- tades de Odontología de las uni- versidades Central del Ecuador y San Francisco de Quito. Además, es Presidente Mundial de la Aca- demia Internacional de Odonto- logía Integral. Correspondencia: bybenalcazar@hotmail.com. INHERENTES A LA ODONTOLOGÍA ACTITUD POSITIVA 1. Rutina y aburrimiento en el trabajo Implementar nuevas tecnologías Organizar grupos de trabajo y estudio Realizar investigaciones. 2. Tensión por desorganización en la consulta Capacitarse en administración de consultorios (libros, cursos). 3. Atención de pacientes «difíciles» Realizar cursos y leer artículos sobre relaciones humanas y psicología. 4. Miedo Físico: agresión, robo, enfermedad Moral: no obtener rendimiento económico Profesional: fracasos en los tratamientos, Perder pacientes, juicios por mala práctica. Racionalizar el miedo como un auxiliar del instinto de conservación y buscar la manera de superarlo. 5. Indecisión «Es preferible tomar una o varias decisiones equivocadas antes que caer en el hábito de la indecisión» 6. Supersensibilidad o afectividad excesiva Duro consigo mismo, sensible con los demás. 7. Preocupación «Para los males del mundo puede haber o no remedios. Si los hay, ponte a bus carlos. Y si no, no seas necio». Consulte las referencias en